viernes, 21 de diciembre de 2007

No me culpo por no adorar a Charlotte

Jóven apuesta y poco dispuesta, bien educada, con trabajo perfectamente estable, canónicamente hermosa y lujuriosamente de buen ver, residente en urbe cosmopolita y moderna, en el epicentro de la vorágine consumista y del desapego mundial, perteneciente a la liga de mujeres emancipadas y liberadas, facción "a la fuerza, yo a la inercia", no por convicción, vive en la inopia de un universo algodonadamente rosa e insosteniblemente conservador.





No es un anuncio por palabras, es mi definición de Charlotte York.






Esa preciosa y concienzudamente anticuada mujer cuyo contacto con la realidad es meramente casual. Calificarla de romántica soñadora me suena demasiado trivial, lo suyo no es un estado de ánimo o un rasgo caracterial, es más bien el burdo pero efectivo resultado de un meticuloso plan venido a trauma educacional, es algo más de tipo congénito, no ilusorio ni infantil, es algo premeditadamente inculcado y transmitido por vía generacional. Algo que se lleva en la sangre y afecta a la salud mental. Porqué distorsiona y entorpece. Porque enajena . Porqué aunque se alabe su vena tradicionalista no hay que confundir salvaguardia de valores con atontamiento falaz.




Yo también creo en el amor eterno, y las descarriadas, las perdidas, las desencantadas de la vida, las que se tiran todo lo que se menea, las que se agrian en el intento, las que dicen que están mejor solas, las que juran y perjuran que nuca se casarán , las que dicen ser mujer de más de un hombre, las que pasan de convencionalismos, las que no quieren ataduras, las que dicen no saber amar...Los cuentos no son buenos ni por defecto ni por demás. Hay sentimientos que mal que nos pese son universales aunque no se asimilen ni ejecuten por igual. Pero no hay que ser esclavo de idealismos prefabricados y dañinos. Porqué te gastan la vida buscando algo que de todos modos vas a saber encontrar. Sin tanta pomposidad extraña. Sin tanto azúcar y con un poco más de sal. Sin dramatismo añadido. Con la justa dosis de realidad. Todos soñamos, idealizamos, y comulgamos. Todos tenemos patrones de vida a calcar. Pero si de vez en cuando uno coje uno un atajo, o se pierde, o se entretiene de más, pues tampoco pasa nada. La finalidad sigue siendo la misma. No te has traicionado. No te has faltado al respeto. Quizás simplemente te has dejado llevar.


9 comentarios:

Andrea Martínez Maugard dijo...

Ls verdad es que Charlotte nunca me llamó mucho la atención, siempre he preferido el desenfado de Samantha, hay algo en ella que pese a ser sumamente opuesta a mí, me despierta una simpatía enorme y me agrada su personalidad, más que la de la dulzona chica que está enamorada del am
or

Anónimo dijo...

tampoco me identifico a Charlotte,demasiado lisa para mi.
Mi sueno no es casarme! Pero Samantha es mas lejos de mi que Charlotte (el sexo por el sexo me parece triste). Me veo mas en carrie pero tampoco me identifico totalmente. Se puede pensar que soy compleja, con razon!

Pina dijo...

Pues a mi Samantha que va... la pelirroja psss y charlotte hummm, me quedo con Carrie sin duda, las demás son como el genial complemento de Carrie ;o)

Anónimo dijo...

Me gustaba su manera de vestir para copiarla en determinados casos: una cena con los suegros, una comida de trabajo... Y me identifico con su parte idealista, aunque en el fondo sepa que no es posible que las cosas duren para siempre. Sería demasiado bonito.

Lucio dijo...

Es tan tierna.y adorable,me encanta cuando carrie le dedica el libro ,para mi amiga charlotte por que pase lo que pase cree en el amor.

Di dijo...

Era el personaje menos agradecido, quizás, porque tenía que contrastar esa personalidad de "poliana de la 5ª avenida" con la realidad del mundo que la rodeaba, además de ser un poco tacaña, aunque al final ella era al final la que nunca fallaba a las demás.

Yo tampoco me identifico con ella pero se hacía querer

CB dijo...

siempre ha sido, con diferencia, mi favorita de las cuatro además de la más guapa y la mejor vestida, adorable, adorable.

Ariadna Ferret dijo...

Charlotte cree en el amor eterno, pero lo busca entre médicos y abogados con casa en los Hamptons y muchos ceros en la cuenta corriente. Me parece algo hipócrita.

Laia dijo...

Exacto Heidi, es un amor no a cualquier precio, es algo tan premeditado, tan a la fuerza, tan buscado, tan falso..sí, sí, al final se casa con el feo, pero un poco agaciado rico que encima es judío y claro, lo de hacerse judío en new york aunque seas una "princesa episcopaliana" es como mudarse a un loft a Brookling..queda muy cool y pasas al segundo grado..enfin, beso!
Baglife. Guapa es un rato pero su pose adorable es demasiaaaaadoooo.Besos!
Di. Totalmente Di, es el contrapunto a tanto libertinaje y es curioso porqué en un momento dado de la serie parece que va dejar de lado esos ideales tan arcaicos y falaces pero al final no hace más que reafirmarlos..bueno, y cuando no le deja el dinero a Carrie para el apartamento ahí sí me cayó bajo, se le ve mucho el plumero, aunque luego lo arregle con el anillo de compromiso..Beso!
lucio. JAJAJA, sí, pero es másque nada un acto de fe. BeSO!
coolhunter. Eso sí, yo para montar una cena o un cocktail en casa, me la pido, porqué en cuanto a saber estar es un diez..su estilo "old fashion" cien por cien americano es lo más, en la primera foto que he puesto me enamoró como va..cien por cien Ralph! Beso!
Pinup.Yo por supuestísimo que también me quedo con Carrie. Beso!
Grenadine. Lo bueno es tener un poco de todas..ese sí es el cocktail perfecto y no el cosmopolitan!Beso!
Aretha. A mí Samantha me alucina, aunque nunca podría ser como ella, la admiro profundamente por esa sobredosis de independencia y esa capacidad suya tan diversificada de amar..beso!


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