martes, 30 de septiembre de 2008

El hombre sin rostro, el yeti, la mujer barbuda y otras tantas criaturas extraordinarias

Me apasiona el circo de los horrores. El circo (hasta el del sol) es deprimente, angustioso y decadente y querer hacer de ello un espectáculo conmovedor y jovial es como empeñarse en que Gareth Pugh es un fenómeno emergente.
Pero esos circos de hombres elefante son absolutamente deliciosos, fiel distorsión de la vida alegre.
Martin Margiela, ese hombre que no existe y que cumple 20 años en el mundo de la moda, ese que alimenta a contracorriente y del que se nutre en contra de toda lógica (propia y externa) se rinde homenaje a sí mismo haciendo un remake de su obra y poniendo la guinda a un pastel sangrantemente burlesco.
Es como si Viktor & Rolf se hubieran metido un tripi.
Fascinante.





































6 comentarios:

Di dijo...

Y a mi que estas provocaciones cada vez me dicen menos, sean de Margiela, de Vicktor&Rolf o de David Delfín.

Pero la primera americana me gusta.

Hummingbird dijo...

he ido rauda a verlo, no para creerlo porque creo en tí, pero me han dado ganas de volver a ver 'la familia adams' después de este remake. uno fuerte scrunchie, XX!

Anónimo dijo...

Pues a mí me da miedito. Además, con tanta parafernalia luego no sé si me gusta la ropa o no. Seré una tradicional, pero a mí los rebeldes como que no.
Besos.

Laia dijo...

En italiano a esto se le llama "presa per il culo", con perdón, pero me gusta ese animus sarcástico el "cumplo veinte años en la moda y hago lo que me da la gana". Mucho mejor esto que rebajarse a fabricar mediocridades. besos a todasss!!

Holly Golightly dijo...

ME ENCANTA ME ENCANTA

ME LO VOY A TATUAR.

ME ENCANTA

Lucio dijo...

A mi también me gusta mucho Margiela, además creo que es de los pocos que tiene algo que contar y encima en sus puntos de venta encuentras cosas maravillosas.Ah! y hola!.


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